Encuentro en Escarlata (el antes y después de una presentación)

No era esta la primera vez que asistía a una presentación de un libro (el día anterior había asistido a otra charla con Pilar Adón) ni que recorría más de cuatrocientos kilómetros para escuchar a un autor; fueron otros los motivos que la convirtieron en algo muy especial.

Obviamente, el interés en la autora –Rosa Ribas- a la que tenía ganas de conocer (literaria y personalmente) tras escuchar a Alice Silver hablarme de ella. También el que fuera esta última la encargada de presentar a autora y personaje –Cornelia Weber Tejedor. Además suponía el reencuentro con algunos blogueros y la posibilidad de conocer a otros “en persona, personalmente”

Si a ello le unimos el marco elegido –la librería Estudio en Escarlata especializada en literatura policiaca, fantástica y ciencia ficción- y que tras la charla habría un “vino germanoespañol” tenemos los ingredientes para conseguir el resultado obtenido; una charla entre amigos.

Gracias a Alice Silver (hablo también en nombre de Isabel) pudimos vivir esta presentación de una forma especial. Habíamos quedado con ella en la librería a las seis y media (una hora antes del inicio del acto) donde también se encontraba ya Rosa Ribas, que estaba siendo entrevistada.

Mientras Alice se encargaba de algunos detalles de logística, Isabel y yo nos hicimos con sendos libros para que nos los dedicara la autora , además de curiosear en la sección de descatalogados; coincidimos en la compra de “un” Lawrence Block –un buen autor que debería ser recuperado” y un libro de oferta (en mi caso El pintor de Flandes, también de Rosa Ribas)

Luego, a medida que fue llegando la gente, Alice nos fue presentando: a Paco Gómez Escribano, que presentaría el libro; a Natalia D, a Jose Ignacio Escribano y su mujer; también a Luis de Luis, que colabora en Prótesis. Además hubo reencuentros como Javi Exanónimo, Boga Vante (habituales del blog de Alice Silver) o Loque. Por supuesto que también nos presentó a la autora, con quien ya pudimos hablar un poco mientras la gente iba llegando.

Aproveché este momento para comentarle a Rosa que había estado caleyando por su página web y había visto algo que me había llamado mucho la atención y que esperaba ver con calma pues creía que podían servirme en un proyecto que estaba preparando y que tenía en común con ellas, el acercar a los chavales a la lectura y la literatura de otra forma Además de escucharme con paciencia e incluso presentarme a su compañera, Celia Jaén, Rosa me explicaba que Entre dos aguas se está usando como libro de lectura para los estudiantes de español allí en Alemania.

Fue también en este momento de saludos y presentaciones cuando hacíamos entre nosotros algunos comentarios sobre los libros de Rosa Ribas u otros autores. Luis de Luis, además de proponer que todos los blogs especializados deberían reunirse en un único portal pues así todos estarían “a mano”, mencionó a Lennox del que, según él, todo el mundo habla maravillas (incluída yo, que le dedicaré la entrada negra de este mes) cuando era un pastiche de Marlowe. Puede que el triunfo de este detective (creado por Craig Russell) sea precisamente por eso y porque ya estamos un poco hastiados de tanto autor nórdico, muchos de calidad dudosa.

Tras la presentación, mientras la pobre Rosa dedicaba libro tras libro, y se fotografiaba con algunos de los asistentes, los demás disfrutábamos del vino aleman –un blanco muy rico- de los quesos también alemanes y de un fuet (por aquello de que Rosa es catalana) y nos dedicamos a charlar sobre los libros, sobre la autora –señalábamos su simpatía y humor – y nos alegrabamos de que nos hubiera caído bien pués aunque debamos separar al escritor de la persona no siempre es posible.

También pudimos charlar con Rosa; Paco Gomez Escribano le preguntaba como llevaba su propio estar entre dos aguas y respondía que cuando está en Alemania echa de menos cosas de España, pero ahora que lleva dos semanas fuera (participó en BCNegra) lo que añora es aquello; que le parece que la solución ideal sería repartir el tiempo entre ambos países, pero eso resultaría muy complicado.

Poco a poco, como suele pasar cuando estás en una tertulia y además estas a gusto, la conversación fue derivando hacia otros derroteros –siempre dentro de lo “negro”. Así hablamos de Larsson, lo que nos había parecido su trilogía, o de Camilleri con Montalvano y el inefable Catarella. A las diez nos tuvieron que “echar de la librería” –al día siguiente debían volver a abrir- pero aún así, algunos de nosotros continuamos la charla mientras cenabamos en un italiano.

Quiero dar las gracias a los dueños de la librería que nos dejaron movernos con libertad, y que además demostraron saber perfectamente lo que se traen entre manos (tal como comprobé cuando les pregunté por un par de libros: un pastiche sobre Sherlock Holmes y un libro de ciencia ficción española del que había hablado Homo Libris).También a Dori, cuya presencia no se vió pero se notó; estuvo al frente del “Catering” y se encargó del reportaje fotográfico. Además soportó con gallardía nuestras obsesiones blogueroliterarias

El Rincón Musical también cree que el encuentro resultó Something Goog