 |
Marco Vichi |
Supe de Marco Vichi y su comisario Bordelli allá por el 2010, cuando Alice Silver le dedicó
una entrada en su blog. Luego, quedó en el olvido hasta que buscando lecturas en italiano, una compañera de clase me prestó
Il commissario Bordelli,
Esta es la primera de las novelas, ambientadas en la Florencia de los años 60, que protagonizará este comisario de mediana edad que luchó contra los nazis -el recuerdo de la guerra y el fascismo aún están presentes-. Bordelli rememorará muchas veces su etapa de soldado; puede que por eso, a sus cincuenta y tantos años, en muchas ocasiones se sienta mayor y piense en el retiro.
 |
vista desde el piazzale Michelangelo |
Frente a los autores más recientes de novela negra, más en la linea del thriller americano, Marco Vichi se alinea con Vazquez Montalván o Andrea Camilleri. Bordelli comparte con Montalbano su amor por la comida y que ambos tienen un restaurante al que van a comer habitualmente, cuyo cocinero jamás les deja salir sin haberse alimentado estupendamente. También, como Montalbano, tiene un joven ayudante en el que confía y con cuyo padre guarda un vínculo; en su caso se trata de Piras, el joven sardo, hijo de un viejo compañero de guerra del comisario. A pessar de eso le encuentro más similitudes con Pepe Carvalho, el personaje de Vazquez Montalván (que acaba de retornar de la mano de Carlos Zanón), aunque Bordelli no queme libros.

Ya dije alguna vez que en las novelas negras, tan importantes como los detectives protagonistas, son los secundarios. Aquí nos encontramos con Piras que es su ayudante y será también su amigo; Rosa, exprostituta; Diotivede, el forense a la par que amigo; Dante, una especie de inventor chiflado o el Botta, un ladrón al que no hay cerradura que se le resista y que es además excelente cocinero,que ejerce como tal en las cenas que el comisario organiza con sus amigo.
El ritmo de las novelas y por tanto el desarrollo del caso es pausado, y no solo hay cabida para el desarrollo de la investigación sino también para la descripción de la vida en Florencia, que se convierte casi en una protagonista más.
 |
Ponte Vecchio |
He pasado de leer
Il Comisario Bordelli a las últimas
y he notado que frente a la primera (no puedo hablar de las publicadas entre medias pues aún no las he leído) en las últimas novelas cada vez ocupa menos peso la resolución del crimen, que por supuesto se da y crece la parte llamémosla costumbrista: como se vivió el desbordamiento del Arno por las lluvias torrenciales en
Morte a Firenze, o como habla del cultivo y la vida en el campo en
La forza del destino, cuando Bordelli abandona la policia y se traslada a vivir al campo
 |
la última aventura del commissario Bordelli |
Me gusta la humanidad de este comisario, su tolerancia con los pequeños delitos y que me lleve a pasear de su mano por una ciudad en que solo he estado una vez pero a la que quiero volver, así que recomiendo muy vivamente a Marco Vichi y su personaje. Y para terminar os dejo el enlace a este
articulo sobre Marco Vichi y su comisario Bordelli o
esta entrevista publicada hace unos años en El Pais
Comentarios