Lo que tuve entre manos este fin de semana |
Al ver las fechas elegidas por Isi para este segundo readathon supe que me iba a resultar bastante difícil participar pero pensé que con un
poco de organización, sería capaz.
El primer día iba a ser el más ocupado; no solo comenzaría a leer
sino que publiacaría los libros elegidos y programaría la entrada con las
preguntas para el sábado. Además iba a comprar los ingredientes para mi
breakfast (quería hacer un bacon caramelizado según una receta de Dona Hay). Pues al final
ni una cosa ni la otras. Al menos conseguí terminar un libro que estaba
leyendo y, casualidades, era en inglés.
El
sábado no mejoró mucho la cosa. Antes de
irme para el pueblo tocaba adecentar un poco la casa así que a lo más que me dio tiempo fue a hacer
las fotografías de los libros. Bueno,
una vez en O. y tras las paradas pertinentes y apertura de la casa, nos
instalamos en el porche a tomar el aperitivo y –ya era hora- comencé a leer.
Después de una buena siesta, me
pasé toda la tarde leyendo, pero de eso se trataba ¿verdad? Tan solo paré para tomar un café y a la hora de la
cena. Cuando me di cuenta eran casi las doce de la noche y no me había acordado
del bizcocho. A esas horas, no me apetecía ponerme a hacerlo; siempre podía tener una merienda inglesa.
A falta de breakfast, hubo coca.. |
El domingo tras un desayuno más
¿continental? –café y tostadas con mantequilla y mermelada- me volví a la cama a
leer un ratín -que se alargó hasta las doce de la mañana-. No me apetecía dejar
de leer pero el paseo al faro es imperdonable.
A la vuelta, tocaba inmersión en la cocina; iba a hacer una coca de verduras y
aprovecharía para hacer el bizcocho. Cual
no sería mi sorpresa al descubrir que no había azúcar –claro, tanto hacer
mermelada …! Así
que también me quedé sin merienda inglesa-
Tras la comida y antes del pigazu terminé The unlikely pilgrimage of
Harold Fry,. Me gustó mucho
y en algún momento se me escapó una lagrimina –por suerte, como estaba leyendo
fuera y tenía puestas las gafas de sol no se notaba J. Hasta que no volviera a Oviedo el
readathon quedaba en suspenso porque, aunque pensé hacerlo, al final no me llevé el segundo
libro elegido.
Para el próximo readathon. |
Ya de vuelta a casa, cotilleé
un poco los avances de los otros readathonianos (me habéis dejado muerta de envidia con vuestros desayunos, con lo que a
mi me gustan –me parece la mejor comida del día) publiqué una primera entrada sobre el readathon y me puse con Cooked.
De lectura más densa que el de Rachel
Joyce, tan solo leí dos capítulos pero creo que me va a gustar. Di con él a través de este
artículo de El comidista. Por cierto,
¿Qué me ha parecido la
experiencia? Práctica pues siempre es un
acicate para leer en inglés y sacar libros de la lista de pendientes.
Interesante porque te permite conocer a otros blogueros y de paso nuevos
títulos –he tomado buena nota del libro sobre Tolkien- y, por supuesto, muy,
muy nutritiva, aunque para unos más que otros.
Comentarios
Ahora me has dejado con muchas ganas de leer a Rachel Joyce; estoy segura de que yo también soltaré alguna lagrimita.
Un saludo!
Me he pasado a leer el artículo de el Comidista del que nos has dejado el enlace y la verdad es que me han entrado muchas ganas de leer el libro.
Un saludo.
Mariuca, tengo la sensación de que también eres cocinillas como yo. Alguna vez he hecho un bizcocho de zanahorias; mi receta lleva almendras ¿El tuyo?
Por lo que leí de Cooked creo que va a ser muy interesante.
Saludos a ambas y perdonad el retraso en contestar.
No viene al caso pero he leído ya The monuments men y me ha encantado.