No podría haber tenido peor despedida del 2012; un cúmulo de malas noticias a mi alrededor, mi ordenador con “bichos” y alguna otra menudencia. Mejor me quedo con lo bueno y le digo adiós, no sin antes hacer un repaso a mis lecturas de los cuatro últimos meses del año.
Ratas de Montsouris, de Leo Malét. No se me ocurre que decir del libro, lo que ya quiere decir algo.
Juego de Tronos y Choque de Reyes , de George R.R. Martin. Pensaba haber publicado una entrada dos o tres días antes de la entrada del invierno –por aquello de El invierno se acerca, de la Casa de los Stark. No pudo ser pero al menos espero publicarla antes de que llegue la primavera.
Estudio en lila, de Maria Antonia Oliver. No fue la BBC la única que jugó con el título de las primeras aventuras de Sherlock . Descubrí a esta detectivA, de nuevo gracias a Alice Silver y me gustó su humanidad y sus contradicciones.
El golem de Praga. Leyendas del gueto judío . Es un libro que recoge leyendas sobre el barrio judío de Praga, desde la construcción de la sinagoga vieja-nueva a la creación del Golem o la muerte del rabino. Os recomiendo la reseña que Gww le dedicó.
El arte de desgranar alubias, de Wieslab Mysliwski. Poco a poco voy acercándome a la literatura eslava actual. Un hombre, antiguo músico, va contándole su vida a una visita mientras ambos desgranan alubias. Al mismo tiempo, nosotros iremos conociendo la vida en Polonia tras la caída del nazismo hasta la actualidad.
-otra entrada que quedó sin escribir en este 2012.
Motivo de Ruptura, de Harlam Coban. El primero de los libros protagonizados por Milton Bolytar , que precisamente debido a su condición de representante de deportistas se verá convertido en investigador.
La marca del meridiano, de Lorenzo Silva. Aquí os daba mi opinión sobre el último premio planeta.
Medusa, de Menéndez Salmón. Tenía curiosidad y terminé por leer el libro. ¿Mi conclusión? Me gustaría más si fuera un poco menos racional y pusiera un poco más de sentimiento.
Una biblioteca de verano, de Mary Ann Clark Bremer. Un libro muy breve , no llega a las 90 páginas pero a la vez lleno de vida y de amor por los libros.
Los amigos de Eddie Coyle, de George V. Higgins. Una recomendación de Domingo Villar que por fin leí. Frente a tanto psicópata, espíritu vengativo, sádico, alcoholizado y deprimido (cuando no todo a la vez) aquí tanto delincuentes como policías se comportan y hablan sobre sus actividades con la misma naturalidad que si tuvieran un trabajo de nueve a cinco.
La librería, de Penélope Fitzgerald. Pura casualidad pero comencé a leer este libro el Día de las librerías. Mientras lo leéis os sentís transportados a ese pueblecillo pesquero e incluso sentiréis la humedad que rezuma el edificio en que Florence ha instalado su librería.
Reunión tumultuosa, de Tom Sharpe. En estos tiempos de pensamiento políticamente correcto, esta desternillante pero al mismo tiempo feroz crítica al sistema del apartheid sudafricano, probablemente no hubiera sido publicada.
A Christmas Carol, de Charles Dickens. Mi primera y única lectura en inglés de todo el año. Todos conocéis a Scrooge y los tres fantasmas que le visitan la víspera de Nochebuena, así que sobran las presentaciones.
Un regalo de Navidad, de Stevenson. En una de mis últimas visitas a la librería lo compré; luego resultó que los tenía en mi edción de Cuentos Completos-Periférica le dio un título nuevo y por eso no me aparecía. Se dice que Un regalo de Navidad -, o Maverick, que es el título original- está inspirado en Crimen y Castigo. Tambien aquí, como en El Doctor Jekill aparece la lucha entre el bien y el mal. El segundo,Olalla, me recordó en cierto sentido a Washington Irving y sus leyendas de la Alhambra –la parte en que habla de su estancia en el palacio de Carlos V-
Para terminar el año, otro relato de este escoces,.El ladrón de cadáveres. Es un relato de terror que al mismo tiempo plantea ciertas cuestiones sobre el avance de la ciencia y la medicina. Os recomiendo que veáis también la película, con Boris Karloff. A pesar de que es muy antigua y que se rodó con un presupuesto muy bajo, sigue mereciendo la pena verla; estoy segura de que os enganchará.
Desde el rincón musical una declaración de intenciones para cada uno de los días de este 2013. Hoy puede ser un gran día
(Como una de las artistas incluidas en la exposición Retratos. Obras maestras del Centre Pompidou, de la fundación Mapfre-Recoletos era Tamara Lempicka he elegido un cuadro suyo para ilustrar la entrada ).
Comentarios
Espero que lo demás vaya mejorando.
Besos!!
Saludos.
El del Golem me parece muy interesante, siempre me ha llamado la atención esa leyenda.
Y el de Los amigos... tengo mucho interés por leerlo.
Un besico!
Ah! y gracias por la cita.
Feliz Año.
Por lo demás, un beso :)
No te creas, Jaal otros años fuí más voraz :-)
Alice ahora quiero leer Mátalos suavemente, que es del mismo autor.
Con Leo Malét lo que quiero decir es que al querer escribir sobre el libro no encontré nada que me llamara especialmente la atención, ni para bien ni para mal.
Susanaese es uno de mis propósitos blogueros del 2013, ir escribiendo las entradas que me quedaron pendientes el año pasado.
Uy, Gww precisamente estoy con Stevenosn y sus relatos de los mares del sur.
P.D: ya tengo escrita y a puntito la entrada sobre HHhH. Aún te debo la de Damasio :)
Enzo no te sulfures. Auunque u a mi lo de miembras, edilas -no te digo ya lo de lideresas- me saca de quicio- aquí tiene mucho que ver con la construcción del personaje y esas contradicciones de las que hablo. El libro está escrito en los años 80.
Otro beso.
Los libros yo, como Isi, no he leído ninguno, así que la lista aumenta.
Un abrazo
Teresa
Tormenta de espadas es el más brutal :( Te lo digo para que te mentalices...
Isi ¿más brutal aún? Estaré preparada :D
Al paso que voy, Gww leerás y reseñarás a Damasio antes de que publique su entrada. Le dejé el libro a mi hermana hace un año y aún no me lo ha devuelto.