Mientas ojeaba un libro de Benedetti en busca de un relato que quería repasar para la próxima entrada, me reencontre con este ¿microrrelato? que volvió a hacerme sonreir y me apeteció publicarlo
¡Qué sintagma!
¡Qué significante!
¡Qué diacronía!
¡Qué Zungenspitze!
¡Qué morfema!
La hermosa taquígrafa desfiló impertérrita y adusta entre aquella selva de fonemas.
Sólo se la vio sonreír, halagada y tal vez vulnerable, cuando el joven ordenanza, antes de abrirle la puerta, murmuró casi en su oído: ''Cosita linda".
(Benedetti, Mario: publicado en Despistes y Franquezas)
LINGÜISTAS
Tras la cerrada ovación que puso término a la sesión plenaria del Congreso Internacional de Lingüística y Afines, la hermosa taquígrafa recogió sus lápices y papeles y se dirigió hacia la salida abriéndose paso entre un centenar de lingüistas, filólogos, semiólogos, críticos estructuralistas y desconstruccionistas, todos los cuales siguieron su garboso desplazamiento con una admiración rayana en la glosemática.
De pronto las diversas acuñaciones cerebrales adquirieron vigencia fónica:
¡Qué polisemia!
¡Qué significante!
¡Qué diacronía!
¡Qué exemplar ceterorum!
¡Qué Zungenspitze!
¡Qué morfema!
La hermosa taquígrafa desfiló impertérrita y adusta entre aquella selva de fonemas.
Sólo se la vio sonreír, halagada y tal vez vulnerable, cuando el joven ordenanza, antes de abrirle la puerta, murmuró casi en su oído: ''Cosita linda".
(Benedetti, Mario: publicado en Despistes y Franquezas)
Comentarios
Valeria tengo la sensación de que don Mario lo debió escribir pensando en alguien :)
Carol acabo de acordarme que tengo una novela suya en el montón de pendientes. Creo que voy a ponerme con ella.
Besos para ti también.
Me gusta la gente....
;-)