García Lorca decía que su poesía era fruto no solo de su talento sino de su trabajo. Hace pocos días Amando Caravias escribía sobre la inspiración. En Una lectora nada común, de Alan Benett, leemos:
Un escritor escocés se reveló particularmente temible. A la pregunta de de dónde le venía la inspiración, dijo brutalmente: "No viene, Majestad. Hay que salir a buscarla."
A la luz de estos y otros textos parece que el talento sin esfuerzo no es suficiente pero ¿qué papel ocupa la suerte? (a algo de eso aludía Menéndez Salmón aquí)
“Cree que todos los escritores serios tienen vocación, una especie de llamada mística. Lo que explotan no es su inteligencia, ni su formación, sino un don glorioso que es también una obligación. (…)
-Tú sabes hacerlo-dice casi lastimero-. Se pueden pasar años estudiando y no aprender a hacer lo que tú haces. (…)
Cosas agradables de oír, aunque oírselas a él me incomoda un poco. Asimilo los elogios, pero me siento en la obligación de quitar importancia a mi talento. Creo que la mayoría de las personas tienen cierto grado de talento para alguna cosa: formas, colores, palabras, sonidos. El talento anda por dentro de nosotros como las astillas a la espera de una cerilla, pero algunas personas con un don tan grande como los demás son menos afortunadas. El destino nunca suelta una cerilla junto a ellas. No es el momento adecuado, o tienen mala salud, o poca energía, o demasiadas obligaciones, lo que sea.
El talento, le digo creyéndome lo que digo, es suerte, por lo menos la mitad. No es como si nuestros labios de recién nacidos fueran tocados con un ascua y de ahí en adelante tropezásemos con los números o tuviésemos don de lenguas. Tenemos suerte con nuestros padres, maestros, experiencia, circunstancia, amigos, tiempos, dotación física y mental, o no la tenemos. Hemos nacido con la lengua inglesa y las oportunidades de los Estados Unidos (…) así que estamos entre los que han tenido una suerte increíble ¿Y si hubiéramos nacido bosquimanos del Kalahari? ¿Y si nuestros padres hubieran sido unos aldeanos desnutridos de Uttar Pradesh y nos hubiésemos visto ante el problema de llamar la atención del planeta a partir de una dieta de quinientas calorías al día y en urdú? ¿De qué sirve tener un as si todas las otras cartas que tienes son muy malas? “
(Sterne, Wallace: En lugar seguro)
Comentarios
la entrada ¡buenísima! un buen escritor para crear, necesita ser disciplinado. A veces me pregunto si esos grandes escritores con una sola obra, no escribirían nada más porque no tuvieron la tenacidad necesaria para sentarse y escribir otra. ¿les dió flojera? ¿es que su talento se fué? ¿Las musas no volvieron a visitarlos?
Te he invitado a jugar un juego, pero tienes que ir a mi blog para ver de qué se trata.
Un beso guapa,
Ale
Desde hace mucho sé que la disciplina y el trabajo es la única garantía de concluir la tarea. Lo que ya no tengo tan claro es que el talento esté presente en cualquier tarea acabada.
Dice bibliobulimica: " veces me pregunto si esos grandes escritores con una sola obra, no escribirían nada más porque no tuvieron la tenacidad necesaria para sentarse y escribir otra. ¿les dió flojera? ¿es que su talento se fué? ¿Las musas no volvieron a visitarlos?".
Sobre esa cuestión creo recordar que también conversamos aquí. Y ambas van relacionadas.
No estoy seguro, pero me da la impresión de que puede haber algo de ello.
Y en otras ocasiones, tengo la impresión de que algunos viven ese talento como una carga insufrible.
De todo hay en la viña del Señor.
Como se afirma en la última línea de la cita de Wallace Sterne, "¿De que sirve tener un as, si todas las otras cartas que tienes son malas?".
¿Conclusión?
Mejor que la musa te pille trabajando. Y como diría Delibes, la inspiración son ocho horas de haber dormido bien.
De nuevo gracias.
"Lo que tú tienes son relaciones conyugales con la literatura, tienes que cumplir con tu señora esposa, mientras que yo tengo relaciones pasionales con mi amante, eso es la literatura para mí: una amante. Cuando noto esa pasión, escribo, y cuando no, pues no. En un pasado reciente estuve muchos años sin escribir, tenía asuntos personales que arreglar y no pasó nada".
Sin duda, recurriendo al refranero, "cada maestrillo tiene su librillo".
Un abrazo.
¡Como que me estoy leyendo el libro y lo leí hará 5 días! :-)
Muy interesante la verdad, y creo que tiene bastante razón, ya se sabe eso de la inspiración y la transpiración.
Ale, yo creo que les dio miedo al fracaso después de un éxito tan grande, o quizá la presión para repetir la obra fue muy fuerte, o lo de las musas, pero por el trabajo, en general, no sé, pero no creo que fuera.
xG
A raíz de eso me acuerdo de Murakami (De qué hablo cuando hablo de correr), que dice que se levanta, sale a correr y se pone a trabajar (a escribir), como un trabajo normal, o sea, que no te llega la inspiración una semana y haces una novela, sino que es perseverancia del día a día.
"Escritor con una única novela" es el protagonista de la novela La importancia de las cosas de Marta Rivera de la Cruz, por si su lectura os desvela alguna clave. Y aprovecho para recomendarla que me ha gustado mucho.
Me inclino a pensar que a esos escritores de una sola obra, más bien lo que les sucedió es que las expectativas creadas con ellas les superaría y bloquearía.
Alice, tienes razón; la receta es aplicable a cualquier faceta de la vida. Y desde luego, un ingrediente imprescindible es el esfuerzo.
Amando, dudaba entre estas palabras prestadas u otras pero al leer tu entrada me decidí. Efectivamente ya hablamos del porqué hay autores de una sola obra. Supongo que habrá un poco de todo; quién decidió que ya no iba a escribir nada que estuviera a la altura; quien no pudo soportar las espectativas creadas o quien, como Kennedy Toole, no pudo soportar el rechazo.
También tienes razón en que no es lo mismo oficio que talento e incluso quien dispone de ambos, no siempre conseguirá obras geniales. El tema es realmente interesante y podría dar para muchas horas de conversación.
Homo Libris ¿qué tal las notas? Me alegro de que te guste la entrada aunque como le digo a Ale, mi único mérito consista en “soltar la liebre”- por continuar citando a En Lugar Seguro
La cita que nos traes de Onetti me lleva a otro tema relacionado que también salió a relucir en la charla con Menéndez Salmón y sobre lo qu hablaba también Alejandro Gallo (otra de mis entradas casi-fantasmas) ¡volveremos sobre ello!
Loque, cuando termines de leerlo hacemos un libro-forum. Pues sí, la inspiración “sin transpiración” sirve de poco. Aunque solo la transpiración puede resultar un asco.
xGaztelu te digo lo que a los demás, mi mérito en esta entrada es muy limitado. En cuanto al esfuerzo, dedicación, tenacidad o como queramos llamarlo es imprescindible para que el talento se desarrolle. Por mucho talento natural que tenga Sergio Nadal para el tenis ¿Cuántas horas entrena al día? O un virtuoso del violín o ….
Isi, tengo que leer ese libro.
Pues sí, la inspiración te puede servir para proyectar o incluso escribir el primer borrador de tu libro pero luego hay muchas horas de “corregir, tachar, cortar, reescribir,…
Hola,Inma, apunto también el libro de Marta Rivera de la Cruz.
Ahora os hago otra pregunta ¿hasta que punto nos fabricamos nuestra propia suerte? -Si os fijais en la imagen que elegí para ilustrar la entrada hay un señor, pintando "seises" en todas las caras del dado-.
¿Fue suerte o perseverancia lo que hizo que la madre de Kennedy Toole consiguiera publicar la novela de su hijo? ¿Hasta que punto lo que a veces llamamos suerte (buena o mala) no es el fruto de nuestras propias acciones?
¿Habéis leído el libro de Alex Rovira y Fernado Trías de Bes La Buena Suerte
Y a tu penultima pregunta no se muy bien que contestar, hay quien se pasa la vida haciendo méritos para algo y siempre se encuentra con trepas por el camino... Por cierto muy buena entrada, aunque ya te lo han dicho infinidad de veces
Me encantan las preguntas de la reina en Una lectora...y del libro de Sterne que más decir, que seguiremos exprimiendolo. Este fragmento que recoges es perfecto!
Inevitable acordarme de La evolución del Talento, que es una cura de humildad, ¿por qué es nuestra especie la que ha sobrevivido, cuando otras tenían iguales o mejores oportunidades? ¿Talento compartido?, me gusta pensar que sí, como todo el que derrocha este blog y sus comentaristas, jejeje!
Estudió como varios artistas encontraban su inspiración, musa, suerte... y al final declara que ella habla con una esquina de su despacho y le increpa: "bueno, ya ves que yo estoy poniendo todo, todo de mi parte, ¿pero tú? ¿estás o no dispuesto a hacer tu parte del trabajo?", entendiendo que el trabajo te corresponde a ti , y también hay algo externo: suerte, musa...qué te ha de ayudar!!!
Lo de la literatura amante de Onetti me ha encantado Homolibris!
Un abrazo a todos ;-)
En cuanto a la suerte, aquí te dejo el final del libro que menciono sobre La Buena Suerte:
Síntesis
Crear buena suerte únicamente consiste en...
¡crear circunstancias!
El nuevo origen de la buena suerte
Dado que crear buena suerte es crear circunstancias...
la buena suerte solamente depende de tí.
A partir de hoy, ¡TÚ tambien puedes crear Buena Suerte!
Maribel es este un tema interesante y que nos invita a reflexionar. Me gusta la definición que das de éxito.
Está claro que hay algo externo, a lo que podemos llamar musa, inspiración o...., pero sin trabajo y esfuerzo no hay nada.
¿Puedes enviarme el enlace de ese video? Me encantaría verlo.